¿Qué es y para qué sirve el Sérum?
No dejas de oír hablar de él, y tampoco te lo paran de recomendar. ¿Qué es un sérum exactamente? Esta es tu oportunidad para conocer con todo detalle lo que este tratamiento de cuidado concentrado puede hacer por tu piel.
El sérum se ha convertido en un indispensable de toda rutina de cuidados que se precie; también en un fijo en todas las conversaciones . ¿Por qué tanta popularidad? Porque, en general, suele tener una alta concentración de activos en su fórmula. Y como después de leer “alta concentración” sabemos que te has quedado con ganas de más, te contamos los 3 aspectos básicos que tienes que conocer para saber qué es un sérum realmente: beneficios, ventajas y modo de uso.
REY DEL CUIDADO FACIAL
Sérum: contiene una concentración más alta de activos que las cremas. También se caracteriza por una textura bastante más ligera, por lo que penetra con mucha más facilidad en la piel, hidratándola intensamente.
En concreto, el Sérum tiene 10 veces más concentración de ácido colágeno que otros cuidados hidratantes. ¿Sabes qué significa esto? ¡Hidratación y firmeza en estado puro!
PARA QUÉ SIRVE EL SÉRUM
- Rellena las arrugas. Gracias a su alto contenido de ácido colágeno, un potente rellenador de la piel que refuerza su hidratación, permite mostrar una piel más tersa. Y apunta: reduce significativamente las arrugas es 3 zonas que seguro que te preocupan especialmente: la frente, la parte inferior de los ojos y el labio superior.
- Devuelve el volumen facial. A medida que cumplimos años, nos empieza a inquietar la pérdida de firmeza en el rostro. Pues bien, este cuidado facial contribuye a redensificar la piel para frenar el temido descolgamiento.
- Permite recuperar la elasticidad de hace 10 años tras un mes*. ¿Recuerdas la sensación de piel flexible y tonificada que tenías antes al pellizcar tus mejillas? Pues no la des por perdida porque con este tratamiento notarás cómo tu tejido cutáneo mejora y gana elasticidad.
¿Más ventajas? Rápida absorción, aporta un plus de hidratación a tu cuidado facial diario, potencia los efectos de tu crema y tiene un tamaño tan práctico que puedes llevártelo a todas partes.
CÓMO APLICAR EL SÉRUM (Y CUÁNDO)
Su textura superligera y fundente facilita mucho su absorción; por ello, con una pequeña cantidad de este producto, será suficiente para cubrir tu rostro por completo.
Aplícalo en forma de gotitas en la zona del pómulo y extiende con las yemas de los dedos, haciendo movimientos circulares y de alisado desde el interior hacia el exterior. También es apto, y muy aconsejable, para cuello y escote. Si quieres, puedes aprovechar el momento de aplicación para poner en práctica algunos ejercicios de gimnasia facial. Así, favorecerás la acción remodeladora del propio sérum.
¿cuándo? Siempre antes de tu crema, tanto de día como de noche, y sobre la piel limpia, porque te interesa que sus activos entren en contacto directo y que no exista una barrera previa que dificulte su absorción.
Este debería ser el primer paso de tu rutina de cuidado facial ¡pero no el último!
Ya conoces qué es el sérum y los beneficios que puede llevar a tu piel.